Desde hace unos años estamos acostumbrados a ver hordas de fans de marcas u objetos concretos hacer colas para comprar un nuevo producto que se pone a la vente en las tiendas. El mejor ejemplo, para lo bueno y para lo malo, es Apple. Cada nuevo iPhone o iPad supone colas de personas pasando la noche al raso si es preciso para hacerse con uno. Incluso la mera apertura de una nueva Apple Store provoca estas colas. Hace casi veinte años, todo era distinto. La presentación de una nueva versión de Windows suscita mucha expectación y acapara portadas, pero a pocos nos cabe en la cabeza una reacción como de la imagen que encabeza estas líneas.
El 24 de agosto de 1995, Microsoft lanzó al mercado Windows 95. La imagen habla por sí sola: pura euforia por hacerse con las cajas (ugh, software vendido en cajas) del producto. Qué época.
Imagen: Torsten Blackwood (vía Business.dk).
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