¿Ven tan bien las aves como se dice? Y si es así, ¿lo hacen mejor que otros animales? ¿Y si pudiéramos "copiar" su técnica para alcanzar una "súper-visión"? Los limites de lo que podemos y lo que no podemos ver se difuminan cada día que pasa.
"A vista de águila" es un dicho muy popular en todo el mundo. Quiere decir que algo está muy lejos y necesitarías la capacidad de un ave rapaz para poder verlo. ¿Hasta que punto es esto real? Es más, ¿y nosotros? ¿Podríamos tener una "super visión" copiando los modelos de la naturaleza? Hoy vamos a responder esta pregunta y algunas cosas más.
Efectivamente, las aves son capaces de ver excepcionalmente bien y no solo las aves rapaces. En general el ojo de los pájaros es bastante superior en poder de resolución y capacidad visual que el de el resto de vertebrados. Es más, es increíblemente bueno lo que nos ha hecho fijarnos como modelo a copiar con la intención de mejorar al máximo nuestra capacidad visual en el desarrollo de lentes, prótesis, ojos biónicos y muchas más cosas. ¿Podremos alcanzarla algún día?
¿Cómo funciona el ojo?
Antes de profundizar vamos a echar un vistazo, nunca mejor dicho, a cómo es un ojo. Los fundamentos de nuestros ojos son muy parecidos a los de las cámaras. A través de una lente se proyecta la imagen sobre un receptor visual que la analiza. Este receptor no es otro que la retina, llena de conos y bastones o fotorreceptores, llamados así por que reciben la luz y se excitan según su intensidad y su longitud de onda, que es lo que define el color de la luz. La combinación de colores, y por tanto de fotorreceptores excitados, transmite una señal que llega al cerebro donde es procesada como una imagen completa.
Cuanto más compleja es la cámara, más información puede obtener el cerebro y por tanto se pueden ver "más cosas", grosso modo. Por ejemplo nosotros poseemos tres tipos de fotorreceptores, uno para el color azul, otro para el verde y otro para el rojo y su combinación es la que nos muestra la paleta que podemos ver. La definición de una imagen la obtenemos según el número de fotorreceptores que hay en la retina y el poder de resolución del ojo. Este último es la capacidad de separar dos puntos de una imagen y depende de La definición que podemos alcanzar está limitada por nuestro poder de resolución
diversos factores. Nuestro poder de resolución es en individuos sanos de 1,75mm a 6 metros, que no está nada mal.
Al igual que nuestros fotorreceptores definen nuestra capacidad de ver colores, nuestro poder de resolución limita lo lejos y el detalle con el que podemos ver. Una curiosidad es que la imagen, en nuestro ojo se proyecta normalmente "del revés". Esto no es problema ninguno para nuestro cerebro que procesa la imagen, al igual que la une y combina para poder evaluar la profundidad o analizar muchos detalles que normalmente ni tan si quiera apreciamos. Ya que no todo es la cámara, o el ojo, en este caso, sino que también es imprescindible el procesado de la imagen.
La vista de los animales
¿Cual es el animal que mejor ve de toda la faz de la tierra? Bueno, eso es difícil de decir. En definitiva casi todos los animales, como otros mamíferos, los reptiles, las aves o moluscos como los pulpos, utilizan la misma base visual que las cámaras. Pero si hablamos de complejidad, la que se lleva la palma es la mantis marina, Stomatopoda sp.. Este animal posee ojos compuestos, como el resto de los artrópodos, que cuentan con hasta 16 tipos de fotorreceptores diferentes y tres compartimentos con su propia pseudo-pupila que le da una visión "trinocular" (la nuestra es binocular). La mantis marina utiliza 12 fotorreceptores para ver el color y los cuatro restantes para detectar la luz ultra violeta y polarizada. Por otra parte, su visión trinocular les da una capacidad de ver en profundidad mucho mejor que la nuestra.
Por suerte no todo es cuestión de visión por lo que aunque ningún vertebrado cuenta con un sistema tan complicado nuestro cerebro funciona como un super ordenador capaz de darnos mucha más información. Las aves, por ejemplo, tienen ojos más parecidos a los reptiles aunque en base son lo mismo. Es como tener una cámara de diferente marca. Por ejemplo, al contrario que los mamíferos, los ojos de las aves son relativamente inmóviles, por eso mueven la cabeza en vez de los ojos. Además son mucho más grandes en proporción y suelen estar más aplanados para obtener un mayor campo visual. Eso sin contar con que tienen varias piezas más, como la membrana nictitante o el pecten. Por si fuera poco, sus retinas tienen una gran cantidad de fotorreceptores de cuatro tipos y que les permite ver Los perros y los gatos sí que ven en color, pero solo en una combinación de dos y no de tres
la luz ultravioleta, con una densidad mayor que les proporciona un poder de resolución hasta 2,5 veces superior al nuestro, y dos fóveas, por lo que ven con un lujo de detalle impensable para un ser humano.
Incluso creemos que pueden "ver" los campos magnéticos gracias a la luz. Además, la forma de sus ojos les permite tener una precisión visual sin igual, detectando detalles, estáticos y en movimiento, impensables para nosotros por ahora. Esto es básico para un animal que vive volando y que necesita un sistema preciso de navegación. En cuanto a los mamíferos, aunque el lince ve bastante bien no lo hace tanto como el dicho. Eso sí, gracias a su ojo es capaz de ver increíblemente en la oscuridad además de detectar posibles presas al instante. Al igual que los perros, los linces y gatos tienen dos fotorreceptores lo que hace que vean en dos colores (y toda la paleta de su mezcla). Un mito muy extendido es que los perros y gatos ven en blanco y negro, cosa que no es cierta aunque en realidad, durante la noche sí que ven en blanco y negro pero con una gran definición que les permite moverse con mucha más comodidad.
Súper-Visión
Todo esto es sólo la punta del iceberg. La visión es uno de los sentidos más complejos e interesantes que la naturaleza ha dado. Tanto es así que los modelos de ojos y procesamiento de imagen son muy parecidos aunque provengan de orígenes distintos. Entonces, teniendo otros modelos tan diferentes y a la vez tan parecidos en la naturaleza, ¿por qué no copiarlos para mejorar nuestra visión?. La súper-visión es un concepto que ha sido buscado por las óptica y la optometría desde hace muchísimos años.
Pero en su búsqueda se ha topado con algunas pruebas difíciles de superar. La primera dificultad se presenta con la degeneración visual. Nuestra visión no es perfecta, ni mucho menos, así que hay que arreglarla para partir de una base conveniente. A eso se dedican la gran mayoría de ópticos del mundo sanitario. Este punto es el que pone la primera y más importante barrera a la súper-visión. Ahora, si pudiéramos tener una visión perfecta (algunas personas tienen esta suerte, pero son muy pocas), ¿cómo la mejoramos? No podemos ver más lejos ya que nuestro propio ojo es el que pone las limitaciones. Es la óptica de nuestro ojo lo que pone la segunda barrera. No podemos aumentar la capacidad de distinguir El poder de resolución es la barrera infranqueable para la súper-visión por ahora
entre dos puntos, el poder de resolución, ya que el número de bastones en nuestra retina es limitado, entre otras cosas.
Es como la resolución de una cámara. ¿Podríamos intervenir quirúrgicamente para "mejorar" esta retina? Por ahora desde que luego no. Y aunque pudiésemos, ¿quién lo permitiría? Tal vez en un futuro lejano, pero no por el momento. La única opción posible es ampliar una imagen artificialmente, cosa que podría hacerse, por ejemplo, con un ojo artificial o biónico, pero no conocemos bien ni como funciona el cerebro ni como construir un dispositivo tan sofisticado por el momento. En una época en al que pisamos cometas a millones de kilómetros de distancia, vemos nacer planetas, podemos comunicarnos de manera instantánea desde cualquier punto del planeta y mil cosas más que parecen salidas de la ciencia ficción, la súper-visión es todavía cosa del futuro. Así que no os queda otra que esperar un poco más para poder verlo con nuestros propios ojos.
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